lunes, 24 de enero de 2011
FINANCIAMIENTO PARA EL DESARROLLO
El enfoque macroeconómico predominante se centra en grandes agregados promedio (inflación, déficit fiscal, PIB, balanza comercial y otros), olvidándose de que la realidad no es igual en todas las localidades. Hay una diferencia marcada entre la infraestructura socio-económica a que tiene acceso un residente en San Salvador a la de un habitante de San Francisco Gotera. Son distintas las oportunidades educativas que tiene un joven que vive en Antiguo Cuscatlán a las de otro que reside en Apopa. En este sentido, conviene incorporar a la discusión nacional, lo específico, que es el ámbito territorial. El desarrollo local sostenible se orienta hacia las necesidades y aspiraciones de la gente a nivel territorial, a través de su potenciación y de la ampliación de sus oportunidades socioeconómicas como parte integrante de la política nacional de desarrollo.
El desafío está en fortalecer la capacidad de gestión local para estimular la inversión productiva, mejorar la infraestructura, salvaguardar el medio ambiente y mejorar la calidad de vida de las familias que allí habitan. Hoy nadie pone en duda la importancia de la participación ciudadana en la solución de los problemas y de las relaciones entre las actividades socioeconómicas y el medio ambiente. La gestión territorial es lo que permite articular y armonizar los aspectos económicos, sociales y ambientales.
De ahí que el financiamiento para el desarrollo local sostenible sea un tema de interés. La gama de mecanismos y modalidades de financiamiento es amplia y evolutiva. Este artículo sólo se refiere a la dimensión fiscal del financiamiento, partiendo de que la descentralización contribuye a aumentar la eficacia y la cobertura de los servicios sociales básicos, y que las disparidades territoriales tienden a aumentar cuando el financiamiento de los servicios descentralizados provienen de transferencias no relacionadas con el aporte local (Iván Finot, ILPES/CEPAL, 1997).
La descentralización fiscal ocurre cuando los ingresos y gastos públicos se desplazan del nivel superior o central hacia el inferior o local. José Antonio Ocampo, Secretario Ejecutivo de CEPAL, afirmó que “la descentralización resulta poco efectiva si los gobiernos locales no cuentan con los recursos financieros adecuados que les permitan adelantar, de manera responsable, la gestión y provisión de los servicios asumidos”. El traspaso de mayores responsabilidades y recursos a los niveles locales, ya sean estos municipales y/o departamentales es un proceso complejo, más aún cuando buena parte de los agentes locales no cuentan con la capacidad gerencial ni con los recursos institucionales y materiales para progresar. Por ello, los procesos locales deben estar vinculados con los programas nacionales de desarrollo, a fin de que los esfuerzos sean duraderos en términos fiscales.
Ocampo subraya que muchos países latinoamericanos siguen caracterizándose por una escasa autonomía en la determinación de los impuestos locales, una alta participación de las transferencias intergubernamentales, un bajo acceso y utilización del endeudamiento y una generalizada carencia de mecanismos de coordinación con los otros niveles de gobierno. Lo anterior da como resultado una permanente brecha financiera a nivel local que limita la consolidación de los procesos de descentralización, lo cual se refleja en la reducida participación de las finanzas locales en el consolidado nacional. La participación de los gobiernos municipales en el total de ingresos públicos sigue siendo baja en la región, oscila entre 10 y 15%. En El Salvador es aún más baja. En algunos países desarrollados la participación municipal en el ingreso público total es entre 30 y 35%.
Harry Jager, director de RTI, destacó en el XIV Congreso Nacional de Alcaldes de El Salvador que antes de la reforma a la Ley FODES (1997), las municipalidades recibían en 1995 por concepto de transferencia un estimado de 4.10 colones por habitante. En 1996 la transferencia se incrementó a 20 colones por habitante. Para el año 1998 se presupuestaron cerca de 121 colones per cápita. A pesar de este incremento, las transferencias resultan ser insuficientes para hacerle frente a los crecientes problemas socio-económicos y ambientales de las localidades. Ello quiere decir que es conveniente que los gobiernos municipales hagan esfuerzos adicionales en aumentar sus ingresos, mejorando el sistema de recaudación y/o de impuestos locales. Prueba de ello es que a pesar de que la Ley General Tributaria Municipal haya sido aprobada en 1991, los ingresos tributarios promedio son inferiores al 20 % del total de ingresos de los modestos presupuestos municipales. Hay cerca de cien anteproyectos de ley pendientes.
En síntesis y con el objeto de evitar que miles de salvadoreños tengan que optar entre ser parte de una mega-ciudad contaminada y violenta, o abandonar el país en busca de una vida más próspera, sana y segura, es que la descentralización se convierte en un medio efectivo para ampliar las oportunidades socio-económicas a nivel territorial. En este sentido, conviene promover una mayor cultura del esfuerzo fiscal local, a fin de que el proceso de descentralización no se convierta en un simple ejercicio burocrático-administrativo; sino todo lo contrario, en impulsor del desarrollo local sostenible. También es crucial que el gasto local sea administrado de manera eficaz, eficiente y transparente.
CAMBIOS DEMOCRATICOS EN MEXICO
Es bueno comentar, en cuanto a democracia, que vamos siendo diferentes a lo que fuimos hasta hace poco. Son cambios de la política, plausibles hasta para quienes vivimos el antiguo régimen. Un ejemplo: En los viejos tiempos, una reunión de tres gobernadores o más constituía una potencial amenaza para la estabilidad política, según los exagerados servicios de información confidencial de la Secretaría de Gobernación.
Igual sucedía en las entidades federativas cuando algunos alcaldes se reunían para comentar problemas comunes, o por motivos sociales: los policías locales corrían traslado al gobernador para lo que “ordenar quisiera”.
Hoy informa la prensa con naturalidad sobre asambleas que celebran los gobernadores de las entidades federativas para discutir sus relaciones con la Presidencia de la República y las diferentes secretarías de Estado; pero nadie se alarma ni les pone un pero.
A ningún ejecutivo estatal espanta, tampoco, que los presidentes municipales efectúen juntas de trabajo. Los gobernadores las promueven como un medio de ventilar problemas y aprobar programas colectivos.
Desaparecidas las negras pesadillas que sufrían quienes ostentaban el poder público, ya no existe aquel horror presidencial a que los gobernadores o presidentes municipales debatan con sus homólogos, pues quedó eliminado el tinte colusorio que les endilgaba el autoritarismo presidencial. Ahora estas reuniones son ejercicios democráticos necesarios.
En Cuatrociénegas, la tierra de Venustiano Carranza tuvo lugar ayer una importante reunión de la Confederación Nacional de Gobernadores, presidida por el Presidente de la República, la cual podría lograr construir la Reforma del Estado mexicano y, a partir de ella, una indispensable IV Convención Nacional Fiscal que defina las atribuciones fiscales privativas de los estados y de los municipios; las privativas del Gobierno Federal y otras deban concurrir los tres órdenes de Gobierno.
Los temas, a partir de esta reunión, son tan importantes que requieren planeación, agenda, consulta y debate en tiempos prudentes, mas no eternos. Uno conduciría a un nuevo sistema competencial, definiendo las facultades y obligaciones tributarias federales, estatales y municipales, así como un modelo de coordinación hacendaria. Otros pretenden la administración fiscal conjunta, las aportaciones y las participaciones, la deuda pública y la debida fiscalización, sin la cual todo corre riesgo.
Pero hablando de tiempos repetiremos el viejo dicho: ni tanto que queme al santo ni tanto que no lo alumbre. La Secretaría de Hacienda quiere alargar la celebración de la IV Convención con el pretexto de que el año próximo 10 estados cambiarán Gobierno, aunque en verdad desea ganar tiempo para reformar el artículo 124, constitucional del capítulo de Prevenciones Generales. La disposición concreta ordena: “Las facultades que no estén expresamente concedidas por esta Constitución a los funcionarios federales, se entienden reservadas a los estados” y Hacienda quisiera reformarla para que el texto incluya y defina sus atribuciones fiscales, lo cual dicen los gobernadores limitaría en el futuro las que corresponden a los estados y los municipios...
La lucha es, como siempre, federalismo contra centralismo. La Secretaría de Hacienda no renuncia a mantener el control fiscal como medio de conservar otro importante control: el político. Y los gobernadores sostienen que se debe buscar una solución integral que defina con claridad el destino del presupuesto federal con la correspondiente asignación de recursos para los tres niveles del gobierno, pues tanto importa lo que ingrese los impuestos como lo que Hacienda deba participar a las haciendas estatales. No olvidemos que quienes contribuimos al fisco federal somos ciudadanos de 32 entidades federativas y esperamos de ellas la contraprestación en obras y servicios para nuestra contribución fiscal...
Otro cambio democrático, digno de ser reconocido, son los procedimientos electorales. Día a día, elección tras elección, se acredita el sistema de comicios, tanto en el libre ejercicio ciudadano, como en la limpieza de procedimientos. A los partidos políticos ya no les conviene hacer trampas, aunque haya quienes las hagan a cambio de una corta feria. No es rentable, políticamente, sujetar un triunfo electoral con el hilo delgadísimo del fraude, de la operación mañosa, del miedo a la violencia. Los Tribunales Electorales de los Estados y el de competencia Federal han contribuido en sus últimas sentencias a darle respetabilidad al procedimiento jurídico que define la expresión de la voluntad ciudadana...
Ahora tocó al PAN recibir una sentencia en contra. En el Sexto Distrito electoral de Coahuila se van a repetir los comicios que había ganado Acción Nacional contra el Partido Revolucionario Institucional. No fue limpia la elección del 6 de julio. ¿Quién gana con un triunfo así? ¡Nadie! Pierden los candidatos, pierde el partido, pierde el Instituto Federal Electoral y pierde dinero el país, pues ahora tendrá que gastar, de nueva cuenta, lo que ya se había gastado. Ahora que lo importante es ganar la confianza de los ciudadanos en el sistema electoral y creemos que estas decisiones contribuyen a lograrlo. Son lentos, pero importantes los avances en la vida democrática del país. Alegrémonos por ello y abramos los ojos ante los que sobrevendrán, seguramente, en los próximos años, esperando que todo sea para el bien de la República y de los mexicanos...
NUEVO PAPEL DEL ESTADO
INTRODUCCIÓN
Uno de los cometidos principales del Estado es su capacidad de evaluación de los objetivos planificados, para aportar mayor transparencia en las políticas públicas que se realizan. Esta evaluación debe incorporarse desde el primer momento de la planificación, de tal forma que ambos procesos estén plenamente relacionados y caminen complementariamente. De esta manera se puede tener mayor control de la ejecución de las políticas que se están aplicando en cada momento, posibilitando satisfacer las exigencias de información y transparencia de los agentes que participan en ellas.
La concesión generalizada de un mayor grado de independencia ¡ara los bancos centrales constituye una de las transformaciones más relevantes que se ha producido en los últimos años en el ámbito de la intervención pública sobre la economía. En un contexto de creciente inestabilidad financiera, las reformas de los estatutos de los bancos centrales se han hecho eco de las propuestas teóricas neoclásicas más ortodoxas y han otorgado un papel dominante a la política monetaria frente al resto de políticas económicas. De esta forma, la estabilidad de precios se ha convertido en el único objetivo que deben perseguir los bancos centrales protegidos, en el desempeño de su función, por un estatuto de independencia que los salvaguarda de cualquier intervención que pudiera darse desde el Gobierno. Sin embargo, y como se plantea en este trabajo, este planteamiento no sólo no está avalado por la evidencia empírica, sino que, además, se justifica sobre la base de una presunta naturaleza técnica de la política monetaria que se revela como una total falacia.
EL NUEVO PAPEL DEL ESTADO SEGÚN LA GLOBALIZACIÓN
Según Alfredo Bullard y Hernando de Soto el papel del estado en una economía abierta al mundo es el de definir bien los derechos de propiedad con registros bien implantados, hacer que el costo de contratar sea mas barato, minimizar al máximo las barreras para entrar a competir en el mercado, hacer convenios de doble imposición tributaria para que los extranjeros y nacionales paguen menos impuestos, proveer de bienes públicos de manera eficiente tales como seguridad nacional, seguridad jurídica, mercados estables, moneda estable, seguridad interior; tener una constitución que limite la intervención del estado en la sana competencia entre privados porque el estado tiene la ventaja de los subsidios tributarios, poner en la constitución que el rol del estado en la economía de bienes privados es SUBSIDIARIO, crear cortes eficientes y eficaces en la administración de justicia, eliminar la corrupción de funcionarios públicos, hacer tratados de libre comercio con países con cuyas economías haya sinergias complementarias respecto de los bienes y servicios.
EL NUEVO PAPEL DEL ESTADO EN LAS POLITICAS CULTURALES
La intervención del Estado en la actualidad
Durante la década de los '80 se instaló en el campo intelectual el debate sobre políticas culturales en las transiciones a la democracia, cuyo principal objetivo ha sido investigar el rol del Estado en la intervención cultural (A. Wortman, 1996: 65). En tal sentido muchos autores, nucleados principalmente por instituciones como FLACSO y CLACSO, han reflexionado sobre el papel de la cultura en países de América Latina.
Según García Canclini (1987: 39), la crisis económica internacional y las dificultades internas de los gobiernos democráticos en los años '70, incrementaron el derrumbamiento de los programas desarrollistas y socializantes en América Latina. Para enfrentar la crisis, las corrientes neoconservadoras reorganizaron el modelo de acumulación, eliminando las áreas ineficientes del capital, buscando una recuperación de la tasa de ganancia mediante la concentración monopólica de la producción y su adecuación al capital financiero transnacional. Los costos sociales de este modelo, que en una primera etapa fue ejercido por gobiernos autoritarios, pero que en la actualidad lo implementan sistemas democráticos, son múltiples y afectan a las grandes conquistas laborales del siglo. Son reestructurados los procesos de trabajo, se reduce el personal, se reducen los salarios en relación con el costo de vida. Simultáneamente a este proceso se restringe el gasto público en servicios sociales; entre ellos, el financiamiento de programas educativos y culturales, y las inversiones para investigación científica; y se ceden espacios tradicionalmente administrados por el gobierno a empresas. La iniciativa privada compite con el Estado con el propósito de sustituirlo como productor de hegemonía (García Canclini, 1978: 42). En este contexto se reduce la inversión de las acciones no rentables, y la política cultural se concentra a grandes espectáculos de interés masivo. Los organismos culturales estatales, como en nuestro caso el T.M.G.S.M., sufren la merma en el presupuesto, limitando su capacidad de acción y ocasionando, en todo sentido, el deterioro de las políticas.
Las consecuencias inmediatas de este tipo de acción sobre el sector cultural afecta, por un lado a la comunidad en general ya que el recorte presupuestario implica reducción de oferta en servicios y bienes culturales. Esto trae aparejado una serie de problemas al desarrollo comunitario
Por otro lado, afecta directamente sobre los productores estéticos y por ende, a la reproducción del capital cultural. Esto en tres sentidos:
a. Las organizaciones culturales estatales tienen una 'valoración positiva' para los productores estéticos en tanto posibilitan cierto tipo de repertorio. Los agentes consideran que la producción privada no invierte en este tipo de espectáculos por su costo de producción, por lo tanto estas obras deben 'estar garantizadas en un teatro oficial', es decir, un tipo de repertorio ecléctico que les permite indagar temáticas, géneros y estilos que sólo son expuestos en teatros oficiales, ya que no son obras que exponga el teatro comercial. La reducción del presupuesto afecta directamente la programación del los Teatros oficiales y en este sentido, se pierde u obstaculiza uno de los objetivos de su existencia: incentivar la producción teatral de aquellas obras que por su costo económico o por que a ellas no "accede el gran público", no se ofrecen el la esfera privada.
b. Las condiciones de producción que ofrecen los teatros oficiales a la tarea del actor, son óptimas en relación a la esfera privada. Es decir, por ejemplo, los teatros San Martín y Colón cuentan con equipos técnicos y talleres que asisten desde el escenario hasta el último detalle del actor. Estas condiciones son ideales para el trabajo artístico de los productores estéticos, ya que a diferencia del teatro comercial o independiente, el actor sólo debe "ocuparse de actuar"(6). Por esto, para los productores estéticos, los teatros oficiales son considerados "lugares de privilegio", para la creación artística. En este sentido, la merma del presupuesto trae aparejada falta de insumos necesarios para las puestas y condiciones laborales conflictivas.
c. Por último, los teatros oficiales tienen una "valoración positiva" por los actores en tanto, la relación contractual que establecen con la Administración (municipio o nación) es generalmente de seis meses con "cachets"(7) , importantes. Además, a diferencia del Teatro comercial o independiente, donde el actor depende de la venta de las entradas para seguir su continuidad laboral, en el Teatro oficial el contrato no se interrumpe. Esta cuestión implica que el equipo artístico solo deba dedicarse a la obra y su creación, no estar pendiente a factores externos que operan contra el objetivo del grupo: la producción teatral.
Estas tres condiciones que ofrecen los teatros oficiales, implican para el productor estético una condición fundamental, no sólo para su propia reproducción, sino también para la reproducción del campo teatral en general. La posibilidad de contar con un salario que no varíe por circunstancias externas (como ser el bordereaux (8)) otorga a los actores la posibilidad de indagar sólo en el lenguaje teatral y creativo sumando todos los esfuerzos en el objetivo común: la constitución de la puesta.
Es aquí donde debemos registrar la importancia y necesidad de políticas culturales que atiendan a las necesidades laborales de los productores estéticos. Hoy en día encontramos serios problemas administrativos y presupuestarios que afectan al campo cultural en distintos aspectos. Uno de ello, que ha cobrado relevancia en estos días, fue el cambio de relación contractual entre los artistas y trabajadores de teatros municipales, con el Gobierno de la Ciudad, exigiendo este último contratos por "locación de servicios" a cambio de las antiguas contrataciones en relación de dependencia. Esta nueva modalidad, que ha sido fuertemente discutida por los gremios, indica la desproteccion asistencial de los "artistas" por parte del Estado, en cuanto a la salud (obra social, licencia por enfermedad y embarazo, etc.) y a lo previsional.
No entraremos a discutir este problema que en sí mismo necesita de una elaboración empírica y teórica. Lo que nos interesa subrayar es el lugar del empleo como modo de inclusión social y productiva. De acuerdo con Bustelo E. y Minujin, A (1997; 10), "[...], uno de los elementos claves -tal vez el central- para garantizar una adecuada inclusión social y productiva, lo constituye la posesión de un empleo de "calidad"; un trabajo que garantice, con un considerable margen de estabilidad, para su poseedor y familia, el acceso a los bienes y servicios básicos y a los constituyentes de identidad compatibles con una ciudadanía plena. Empleo de calidad no necesariamente implica un trabajo asalariado con contrato permanente, sueldo medio o alto y cobertura legal y social; denota en muchos casos una amplia gama de trabajos no asalariados que responden a las aceleradas transformaciones tecnológicas y de producción que se observan en la actualidad. En este sentido, los productores estéticos, viven en una zona constante de vulnerabilidad.
La política cultural debe estar dirigida a dos sectores: a la comunidad, garantizando una inclusión social, y a los trabajadores de la cultura, permitiéndoles una inclusión económico-social. Para ello debemos como dice (XX), las políticas culturales deben operar según el modelo de ciudadanía emancipada , en el cual " el rol de las personas no es de meros espectadores sino el de participantes, habilitados para construir (Ibidem; 22).
En tal sentido, como bien expone Garnier (1996;228) al hablar de políticas sociales, en este caso es también necesario definir claramente la responsabilidad política y cuáles son los rectores de la política cultural sus distintos campos. Además, deben establecerse las responsabilidades en la ejecución de la política cultural, o sea en su gestión.
Por último, es necesario consolidar una visión unitaria e integral de la política cultural en su conjunto y en consecuencia establecer las prioridades entre los distintos sectores que integran el área cultural y al interior de cada sector. (Ibidem, 230). Coincidiendo, con el planteo, consideramos que el rol del Estado implica la definición de las políticas, su supervisión y la evaluación de sus resultados.
EL PAPEL DEL ESTADO EN EL CRECIMIENTO ECONÓMICO.
La relación entre la economía y el Estado
El papel sustancial del Estado en la sociedad actual es el de asegurar la obtención de los beneficios de las empresas, permitiendo la acumulación de capital por parte de unas pocas personas (en comparación a la gran masa trabajadora) y el conservarlo privadamente con tranquilidad. Como estos beneficios deben ser constantemente ampliados por la repetición del circuito de producción descrito en capítulos anteriores, el Estado debe asegurar las condiciones para que exista un crecimiento económico suficiente para lograr este objetivo. A esto se refieren los economistas actuales con la expresión “crear un ambiente de negocios”, un entorno social e institucional que favorezca la existencia de excedentes y les posibilite su retención en manos privadas. En lenguaje empresarial un sistema donde se garantice la propiedad privada de los medios de producción, las reglas de juego (leyes, decretos, políticas económicas) sean claras y con relativa permanencia, la justicia proteja lo que entienden sus derechos (la apropiación del excedente) y exista una cultura empresarial desarrollada.
Desde este punto de vista, no es posible considerar el sistema actual como un sistema económico únicamente privado. Esto no significa que no se cumplan los análisis y tendencias que hemos descrito con anterioridad, por el contrario no se puede explicar las fluctuaciones de la economía de la sociedad actual sin estas leyes. Pero sí significa que la economía capitalista basada en unidades empresariales no coordinadas no se podría sostener sin las actividades de protección, estimulación y socialización que realiza el Estado. Baste nombrar en cada caso y a manera de ejemplo no taxativo el aseguramiento de los derechos de propiedad en sus diversas formas (para asegurar al empresario la apropiación de los excedentes creados por el trabajador), las actividades de investigación básicas y aplicadas (contribuyendo al progreso técnico tan necesario al capitalismo, realizando el Estado estas actividades no rentables en sí mismas) y la educación de la población (para reproducir la fuerza de trabajo en condiciones adecuadas al grado de progreso técnico alcanzado.)
Es totalmente cierto que en la sociedad actual Estado y empresarios no son la misma cosa. El capitalismo, a diferencia de los sistemas anteriores tales como el feudalismo y la esclavitud, es un nuevo sistema en el que la estructura económica no tiene acceso directo a los medios de violencia para imponer una coerción directa de acuerdo a sus intereses. En ese sentido en la sociedad actual existen una dimensión económica y una dimensión política que en determinados momentos de la vida de los países pueden entrar en tensión. La sociedad económica conforma un sistema en donde todos los elementos se relacionan y producen resultados que no se pueden explicar en forma aislada. Pero en la marcha normal del sistema y, más aun en los momentos de crisis, el Estado interviene en la organización social en representación de los grupos dominantes económicamente.
Desde un punto de vista histórico, el Estado desempeñó un papel esencial en la creación del mercado nacional a partir de los mercados locales existentes en los burgos de la época feudal y de los mercados internacionales de los mercaderes de esa misma época. Estos mercados nacionales de los siglos XVIII y XIX junto con la evolución técnica y social propiciaron el pasaje de la manufactura a la gran industria y del trabajo manual al mecanizado. El papel del Estado a este respecto no finalizó con la creación de mercados nacionales: en la medida que la acumulación de capital lo hizo necesario el Estado en los países desarrollados apoyó por medios diplomáticos y militares la obtención de mercados para sus productos mediante el imperialismo a finales del siglo XIX o la apertura de mercados por negociaciones bilaterales y multilaterales en siglo XX, a la vez que aseguró el acceso de las materias primas necesarias para el proceso de industrialización (de las cuáles la más conocida y también la más importante pero no la única es el petróleo.)
La intervención del Estado ha crecido a lo largo de la historia del capitalismo por la necesidad de favorecer la reproducción de un sistema cada vez más complejo, regulando mútiples esferas de actividad en cuanto ellas fueran claves para el proceso de acumulación de capital.
La internalización del capital, la competencia creciente por los mercados internacionales debido a las necesidades de reproducción constante del capital, el creciente costo de investigación, desarrollo y adopción de nuevas tecnologías, la incrementada complejidad de preparación de la fuerza de trabajo y el imperativo de introducir elementos que legitimen el sistema explican la complejidad actual que hace necesaria un rol cada vez más activo del Estado, sea o no explicitado por aquellos que propugnan una menor intervención del Estado. Por el contrario, el mantenimiento y ampliación de un orden social que favorece a determinados grupos sociales es una cuestión de primera prioridad en sus acciones, a punto tal de que luego de la Segunda Guerra Mundial, en los países europeos el capitalismo amenazado por las luchas sociales y la cercanía de la Unión Soviética, utilizó parte de los excedentes para brindar servicios sociales (mejorando el nivel de vida de los trabajadores) en un afán (exitoso) de mantener el orden social capitalista.
Quienes propugnan la menor intervención estatal lo hacen pensando en lo que ha sido característico del Estado en el sistema capitalista: retirarse de las actividades que pueden generar beneficios , quedándose con las actividades no rentables. De esta manera, por una parte la masa de excedentes generados por los trabajadores productivos puede transformarse en beneficio para los empresarios, por otra el capital estatal permite un monto inferior de capital constante a los empresarios lo que aumenta su tasa de beneficio.
También para mejorar la rentabilidad empresarial el Estado se encarga de realizar las obras de infraestructura necesarias para la mejora de las técnicas de producción y la gestión de comercialización, abaratando los costos de suministros a las empresas permitiéndole una mayor rentabilidad al transferirles recursos desde otros sectores sociales. En muchos casos el Estado toma a su cargo la investigación científica y los conocimientos obtenidos son transferidos gratuitamente a los empresarios.
Y en épocas de crisis la intervención del Estado favorecerá a los empresarios, facilitando (aunque no es la causa) la reducción de los salarios reales que elevará la decaída rentabilidad de las empresas, procediendo a la liquidación de las empresas pequeñas que eliminará capital constante a la vez que concentrará la producción en grandes empresas y, en las crisis más graves, cambiando el marco institucional para lograr que el esquema de producción ampliada se ponga nuevamente en marcha. Debe quedar en claro que el cambio de marco institucional que el Estado a través de los agentes políticos propicia no cambia los instrumentos básicos de la economía actual, la búsqueda del beneficio y la competencia, por el contrario siempre el Estado termina adaptándose a ellas.
El Estado en la sociedad capitalista no puede excederse de ciertos límites, los empresarios nacionales o transnacionales según el caso, poseen las herramientas necesarias (control de la inversión, flujo de capitales, etc.) como para bloquear cualquier intento de autonomía del gobierno con respecto al mundo empresarial. Por el contrario, en la mayor parte de la historia económica de los países el Estado se ha aliado con los grupos dominantes que buscan aumentar sus beneficios, por medio del crecimiento económico y/o asegurándose una mayor porción de la riqueza generada. Y en la actualidad, la expansión del comercio internacional, los flujos financieros y las inversiones extranjeras directas, de la mano de las estrategias empresariales de las multinacionales productivas, comerciales y financieras ha supuesto una pérdida de funcionalidad del Estado como regulador del proceso de acumulación y un desarrollo de estructuras y organismos internacionales, aún más aliadas a los intereses capitalistas dominantes a nivel global.
Establecido entonces el rol general del Estado en el proceso de acumulación, pasaremos a analizar como las políticas específicas de los gobiernos influyen sobre el crecimiento económico.
EL NUEVO PAPEL DEL ESTADO EN LA GESTIÓN DEL TERRITORIO
Las transformaciones socioeconómicas, culturales y tecnológicas asociadas a la globalización o mundialización son innegables, y las implicancias en los territorios trascienden los límites políticos y naturales para convertirse en verdaderos vectores de cambio local y mundial, afectando tanto a los espacios activos o centrales como a los pasivos o periféricos.
Los Estados, en tanto que meta-actores, organizadores e impulsores principales del desarrollo, han sufrido también las sacudidas de la globalización que los ha obligado a redefinir su forma, tamaño y modo de gestión. En efecto, el modelo de Estado Nación vive una profunda crisis bidimensional, tal como lo presenta Kaplan: “El Estado-nación y su soberanía sufren una doble erosión. Por una parte, desde afuera, las fuerzas y procesos de la transnacionalización. Por otra parte, en el interior, la descomposición económica, la disolución social, la desestabilización política y la segmentación de las sociedades y Estados nacionales en los niveles regionales y locales. En esta erosión del Estado y de su soberanía convergen las coordenadas externas del sistema con las internas”(Kaplan, 1995).
Una de las respuestas del Estado a los procesos erosivos sobre los territorios y un imperativo de la cooperación internacional en la década de 1980, fue la descentralización concebida dentro de la reingeniería del aparato estatal y en la cual el Estado central delega responsabilidades a los poderes locales y regionales, rompiendo de esta forma con el paradigma anterior de la planificación centralizada. Las fórmulas de “Estado mínimo” o “desmantelamiento del Estado” muestran la orientación clara de los nuevos desafíos del Estado alimentados también por la veloz apertura económica y emergencia de las empresas como actores en el juego del desarrollo nacional.
Así también, los procesos de integración regional, como el Mercosur, impusieron al juego económico reglas innovadoras debilitando el margen de maniobra de los Estados, especialmente en lo referido al control del sistema económico que comenzaba a “abrirse” a los demás actores, que esta vez no eran sólo otros Estados, sino un conjunto de empresas nacionales, transfronterizas y la propia sociedad civil. En este escenario los Estados seguirán constituyéndose en los actores principales, aunque no ya los únicos, del contexto nacional e internacional rompiéndose una larga hegemonía.
La redefinición del Estado se realiza entonces en función del conjunto de problemáticas internas y oportunidades de integración al sistema económico regional y mundial. Este cambio de paradigma exige no solamente nuevas herramientas para pensar y gestionar el desarrollo desde el Estado, sino también nuevos niveles y roles del mismo, sus modos de inserción al mundo y la forma de articulación con la sociedad civil. De esta manera asistimos a profundos cambios provocados por la mundialización que nos dirigen hacia la sociedad pos-industrial.
Tal como señala García Delgado, el Estado debe redefinirse y reposicionarse para lograr una eficiente gestión del desarrollo y de su territorio.
No obstante, la experiencia demostró en varios países latinoamericanos que la transferencia mecánica de competencias y responsabilidades del Estado a los gobiernos municipales y departamentales no produjo los efectos deseados, mientras que nuevos conflictos sociales se agregaron a los anteriores para acelerar la fragmentación social.
En términos territoriales la descentralización no produjo los resultados esperados en la promoción del desarrollo de los territorios, por lo que es lógico cuestionar qué tipo de Estado tiene que forjarse en la presente época: ¿Cuáles serán las funciones que demandará la sociedad pos-industrial? Los conceptos de eficiencia, equidad y crecimiento parecen ser las bases probables sobre las cuales tendrá que construirse el nuevo modelo de Estado, que en menos de tres décadas pasó de Estado-gigante a Estado-mínimo o, como afirma García Delgado, pasó de Estado Omnipresente a Estado casi Ausente.
En el siguiente cuadro se presenta la evolución de los roles del Estado, con la propuesta de un nuevo paradigma de funcionamiento estatal una vez superadas las dos primeras etapas.
Ante este torbellino de cambios multidimensionales, el Estado se ve obligado a redefinirse y reposicionare en varios escenarios, pero esta vez bajo fuertes presiones estructurales de impacto global que afectan a todos los Estados y a todos los territorios.
El Estado paraguayo, al igual que los del continente sudamericano, tiene que rever los mecanismos e instrumentos de gestión y aplicación de su desarrollo, pero por sobre todo debe construir un nuevo sistema de gerencia para su territorio; no ya en función a límites administrativos, políticos o naturales, sino en directa relación con sus objetivos estratégicos. Las formas de intervención en los territorios tienen que modernizarse, trascendiendo las unidades tradicionales de la división administrativa, pasando a ser reguladoras de los procesos económicos y con objetivos y medios diferenciados según las regiones.
Otra modificación importante surgida en la última década es la emergencia de nuevos actores en la escena socioeconómica, aparición que se produjo al mismo tiempo que el retroceso del Estado. De esta manera, el nuevo contexto de la economía y política está constituido por una diversidad de actores entre los que sobresalen las empresas, el Estado, la sociedad civil y los organismos internacionales. Los pesos específicos de los mismos han variado notándose la disminución del peso estatal y el crecimiento gradual de la sociedad civil, mientras que las empresas han ocupado parte del espacio dejado por el Estado en su retirada, lo que les confiere amplios márgenes de maniobra y, muchas veces, de presión para imponer sus estrategias productivas y comerciales. Esto obliga a que los procesos de desarrollo sean construidos en forma conjunta consensuando y negociando intereses y recursos múltiples.
Ante los nuevos escenarios globales caracterizados por la apertura externa e interna, cambios en las formas de administrar y producir y revolución tecnológica que transforma el sentido de la distancia, los Estados están llamados a reposicionarse como actores claves del desarrollo. En esa línea, el nuevo Estado o Estado moderno debe incorporar, comprender e instrumentar los procesos sociales, demográficos, migratorios, productivos, comerciales, ambientales y geopolíticos, para alimentar el desarrollo de los países. El desarrollo nacional ya no está concebido como el crecimiento económico y el aumento de la calidad de vida en todo el territorio, sino como un conjunto de regiones articuladas y competitivas que logran autodefinirse, auto-construirse e insertarse de forma eficiente a los mercados locales, nacionales e internacionales.
PROPUESTAS DE PRIVATIZACION
Privatización de Pemex
Abril 8, 2008 22:00- Fecal sale en cadena nacional con un discurso triunfalista sobre que PEMEX no se privatiza y muchas patrañas más. Alega que Cuba y Estados Unidos ya extran petroleo en aguas internacionales gracias a las asociaciones. Lo que no dice es que esos países rentan tecnología sin vender soberanía.
Dice que privatizando PEMEX ya tendremos preparatorias y universidades.
Dice que privatizando PEMEX ya tendremos preparatorias y universidades.
Lanzará bonos ciudadanos de 100 pesos para que sientas que PEMEX es tuyo, dice que no son acciones pero tampoco dice cómo evitar el acaparamiento de esos “bonos”
Andrés Manuel López Obrador puso en receso las movilizaciones en contra de la reforma energética hasta ver qué sucede el jueves por la mañana en el Senado de la República.
Reforma no busca privatizar Pemex.-FECAL
Ciudad de México (8 abril 2008).- El Presidente Felipe Calderón afirmó que la iniciativa de reforma energética presentada esta tarde en el Senado no tiene como objetivo privatizar a Petróleos Mexicanos.
“El petróleo es nuestro y vamos por él. Debemos invertir ahora. Pemex no se privatiza, eso no está a debate”, señaló.
En mensaje transmitido en cadena nacional el Mandatario destacó seis puntos de la iniciativa enviada a la Cámara Alta entre los que destacan la creación de ‘bonos ciudadanos’ para consolidar a Pemex con los que, dijo, los mexicanos no solo serán dueños del petróleo sino que recibirán parte del dinero que genere la paraestatal.
Agregó que los bonos, que tendrían un valor de 100 pesos, sólo podrían ser adquiridos por mexicanos y se impondrían límites para que no sean acaparados por unos cuántos, no obstante, aclaró que no se trata de acciones por lo que no estará en riesgo la propiedad de la empresas.
El Mandatario propuso dotar a la paraestatal de mayor libertad en el manejo del presupuesto, crear una nueva estructura administrativa que permita establecer un régimen en materia de contrataciones distinto al resto del Gobierno.
Para reducir la importación de gasolinas, señaló que busca contratar a empresas especializadas para contruir nuevas refinerías, pero conservando la propiedad del producto y sus derivados.
Adicionalmente, Calderón señaló que la iniciativa contempla mejorar el proceso de rendición de cuentas de la empresa para garantizar la transparencia absoluta en su operación.
Además, el jefe del Ejecutivo llamó a la discusión en el Congreso para su análisis.
En mensaje transmitido en cadena nacional el Mandatario señaló que se busca fortalecer la soberanía energética y destacó los beneficios en la materia.
“Si el Congreso aprueba la reforma estamos en posibilidad de garantizar el acceso a educación y una plena cobertura de salud de todos los mexicanos”, dijo
REFORMAS CONSTITUCIONALES
Constitución de 1917
Tras el gobierno de Juárez, Lerdo de Tejada asumió el poder y de intentó reelegir, lo cual hizo que Porfirio Díaz se rebelara contra él, logrando quitarlo del poder. Díaz asumió la presidencia en más de una ocasión, hasta que en 1911 el Plan de Ayala dio inicio a la Revolución Mexicana, que desembocó en el destierro de Díaz y la subida de Francisco I. Madero al poder. Tras unos cuantos conflictos, el 1 de mayo de 1917 Carranza ocupó la presidencia.
El gobierno de Carranza se caracterizó por la represión de opositores (incluso mandó matar a Zapara en 1919). Trató de imponer a Ignacio Bonillas como sucesor a raíz de lo cual Adolfo de la Huerta proclamó en Plan de Agua Prieta, causando la destitución de Carranza y su posterior asesinato.
A pesar de todo esto, lo que tiene relevancia del gobierno de Carranza en cuanto a la historia de las constituciones de México, es la promulgación de la Carta Magna que nos rige hasta la fecha, con algunas modificaciones, por supuesto.
Siendo Carranza el jefe del Ejército Constitucionalista que luchaba contra Díaz en la Revolución y más tarde presidente, en diciembre de 1916 convocó a un congreso (formado por gente de todo el país con diferentes profesiones) que debería reformar la Constitución de 1857, el cual promulgó el nuevo documento el 5 de febrero de 1917 en el Teatro de la República en Querétaro. La Constitución conserva las garantías individuales y la forma de gobierno (republicana, representativa, democrática y federal), prohíbe la reelección (lo cual era un tanto lógico al estar a mitad de un conflicto derivado de ella), ratifica la supresión de la figura del vicepresidente, da más autonomía a los estados al dejarlos tener su propia constitución (subordinadas, desde luego, a la Constitución federal) y decreta (por fin) la libertad de culto, la educación laica y gratuita, regulación sobre la posesión de tierras, la jornada laboral de ocho horas máximo y derechos de expresión y asociación para los trabajadores.
En cuanto a las reformas significativas que sufrió la Constitución, están la de 1953 en la que se le otorgó el derecho a las mujeres de votar, la de 1969 en la que se declaró ciudadano a todos los mexicanos mayores de 18 años (que llevaran un modo honesto de vivir, por supuesto) y las de 1977, 1986, 1990, 1993, 1994 y 1996 que tienen que ver con reformas electorales (el voto ahora es universal, directo, secreto y libre y contamos con el IFE para regular que las elecciones sean limpias e imparciales).
La Constitución de 1917 está pronta a cumplir 100 años de vigencia. Es cada vez más evidente que el documento que algún día estuvo entre los más modernos a nivel mundial, actualmente cada día está más y más rezagado. Es necesario que se haga una reforma que permita actualizar la Constitución a las necesidades de la sociedad mexicana.
Nuestra Constitución actual y muchas otras están formadas por dos partes:
-Dogmática: En ella se declaran y garantizan los derechos individuales de los ciudadanos a los que rige la constitución.-Orgánica: En ella se expone la forma de gobierno, la estructura y la división de poderes y todo lo relacionado con los órganos de poder, incluyendo la elección de sus miembros, la creación o modificación de leyes,
A modo de conclusión
Cuando estudiamos historia a lo largo de nuestra educación, evidentemente tenemos conocimiento de los diferentes documentos que han regido la vida del país, sin embargo, quizá en parte debido a la falta de profundidad con que se manejan los temas (a pesar de que vemos lo mismo cada 2 años, lo cual me parece una falla enorme del sistema educativo) no se dedica mucho tiempo al análisis detallado de algo tan importante como las modificaciones de la Constitución a lo largo de la historia del país.
Es más que obvio y sin embargo, yo no estaba 100% consciente de lo mucho que refleja una Constitución de cualquier país el estado en que éste se encuentra. En el caso de la de nuestro país, queda clarísima la lucha entre liberales y conservadores, la fuerza que tenían ciertos grupos (como el clero y la milicia) y la maduración progresiva de México.
La historia de las Constituciones ha sido turbulenta como la de México mismo. Es importante conocerla, como toda la historia, para entender cómo es que las cosas terminaron desembocando en lo que vivimos ahora e intentar hacer algo por frenar al menos un poco la caída del país por el precipicio, misma que cada vez parece más inevitable. Además, es también fundamental conocer las características de documentos anteriores para saber qué cosas funcionaron y cuáles no y con base en eso poder hacerle mejoras a la Carta Magna que actualmente nos rige. Como en bien sabido, el fin del estudio de la historia es comprender los cambios y evitar conocer los mismos errores que tuvieron lugar en tiempos previos.
POLITICA ECONOMICA
sistema de medidas económicas que el Estado aplica en interés de las clases dominantes. La política económica influye sobre muchos aspectos del desarrollo de la sociedad y, ante todo, sobre sus fuerzas productivas. El carácter, la orientación social y la extensión de la influencia que ejerce la política económica son totalmente determinados por el régimen político-social, por las leyes objetivas de su desarrollo. Sobre la política económica del Estado influyen, asimismo, las condiciones históricas concretas del desarrollo de la sociedad dada, la correlación de las fuerzas de clase, el grado de la lucha de clases en el plano interior e internacional. De ahí que la política económica que expresa los intereses de las clases dominantes, se aplique según formas y métodos distintos en dependencia de las condiciones y tareas de tal o cual etapa de desarrollo de la formación económico-social dada. La propiedad privada capitalista sobre los medios de producción y las relaciones de producción que de ella se derivan, determinan el carácter de la política económica del Estado burgués, cuyo fin estriba en proteger la propiedad capitalista y ampliar la esfera de la explotación capitalista. Dicha política económica, en su conjunto, se opone a los intereses fundamentales de las masas trabajadoras y por este motivo lleva a una agudización de los contradicciones de clase. La propiedad privada y el carácter espontáneo del desarrollo de la economía capitalista limitan la acción que sobre la vida de la sociedad ejerce la política económica del Estado burgués. En la época actual, el Estado capitalista tiende a intensificar su intervención en la esfera de la vida económica, a ejercer una influencia reguladora sobre la economía. Esta acción de la política económica burguesa sobre la producción se circunscribe a medidas aisladas y, no puede asegurar el desarrollo planificado de la economía en escala de toda la sociedad. Como quiera que en los países capitalistas la economía esta sujeta a un régimen de propiedad privada, las medidas indicadas se llevan a cabo sólo en lo que favorece a los intereses ante todo de la burguesía monopolista. Las relaciones socialistas de producción confieren a la política económica del Estado socialista un contenido distinto, por principio del que poseen en el régimen capitalista. En la sociedad socialista, la política económica se basa en la utilización consciente de las leyes económicas del socialismo y se orienta hacia la creación de las condiciones necesarias para que se incremente rápidamente y sin obstáculos la producción social con el fin de satisfacer las crecientes necesidades de toda la sociedad y de cada uno de sus miembros. Bajo el socialismo, aumentan en proporciones inmensas el papel y la magnitud de la acción que ejerce la política económica del Estado sobre el desarrollo de la sociedad, pues dicha acción abarca a toda la economía nacional y se lleva a cabo de manera planificada (Ver Planificación de la economía nacional, Función económica del Estado socialista).
JOSÉ LÓPEZ PORTILLO Y PACHECO (1976 -1982)
DEUDA EXTERNA
En cuanto a la deuda externa cada vez se le debía más a EUA, fue entonces que se incrementó al consumo general un 15%, lo que se llamaría IVA. La administración de Portillo, estuvo marcada por sus esfuerzos para aprovechar los inmensos recursos petroleros de México y por lograr una mayor independencia económica de Estados Unidos. Promovió la denominada Alianza para la Producción, promulgó una ley de amnistía política, y en el campo de las relaciones internacionales restableció las relaciones diplomáticas con España. Convocó una importante reunión Norte-Sur y propuso en la Organización de Naciones Unidas.
TERRIBLE DEVALUACIÓN DEL PESO
En un informe de gobierno hizo mención acerca del peso que ya estaba devaluado y dijo que defendería la moneda como perro. El presidente mexicano José López Portillo restableció relaciones diplomáticas con España, interrumpidas durante 38 años. Así mismo, durante su mandato, se inició en el golfo de México (1979), la explotación de los dos pozos petrolíferos de mayor producción mundial. López Portillo deja el poder al Licenciado Miguel de la Madrid en el año de 1882.
MIGUEL DE LA MADRID HURTADO (1982 - 1988)
MODIFICACIONES EN SECRETARÍAS
A pocos días de que Miguel de la Madrid tomó posesión de la Presidencia de la República, envió una iniciativa de ley al Congreso de La Unión para modificar la Ley Orgánica de la Administración Publica Federal. En ella concluyó modificaciones para adecuar la estructura de su gabinete al proyecto político que tenia planeado para gobernar a la Nación. Le creó al Lic. Francisco Labastida la Secretaria de Energía, Minas e Industria Paraestatal, que sustituía a la Secretaría de Patrimonio Nacional. El cambio de ese nombre no era casual, pues mantenerla como una dependencia que administraba el patrimonio de la Nación significaba que los organismos ahí controlados no pudieran ser vendidos a la iniciativa privada. En cambio su bautizo implica entender al aparato empresarial del Estado como un conjunto de bienes rematables que no formaban parte de la riqueza nacional. Supuestamente para corregir los males de la corrupción y la conducción estulta de las agencias publicas fue creada, también a iniciativa de De la Madrid, la Secretaría de la Contraloría General de la Federación, ahora llamada casi de igual manera. Los mexicanos y ya muchos extranjeros saben muy bien para que sirvió la creación de tal elefante blanco. El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, el INEGI quedó bajo el control del entonces encargado del despacho de Programación y Presupuestos, Lic. Carlos Salinas de Gortari, absorbiendo funciones que le correspondían en parte al Instituto Nacional de Población, adscrito a Gobernación y otras responsabilidades que le competían a la Secretaría de Hacienda. Esa dependencia se convirtió en una verdadera fuente de investigación privilegiada e incluso de inteligencia política para el grupo compacto salinista que desde esos momentos ya estaba apoderándose de todas las áreas estratégicas del Estado.
CARLOS SALINAS DE GORTARI (1988 - 1994)
PRIMEROS RESULTADOS DEL TLC
La decisión de negociar el TLC se dio en el contexto de la nueva realidad mundial. A lo largo del proceso estuvo presente una preocupación constante entre los mexicanos: ¿La integración económica con los Estados Unidos representaría la pérdida de nuestra soberanía? Sin duda, al negociar, fue necesario hacer concesiones para obtener beneficios a cambio. Con el TLC, el gobierno mexicano tuvo que garantizar que ya no se ejercerían las decisiones discrecionales que otras administraciones practicaron en el pasado para orientar la economía. Sin embargo, ese compromiso no representó una capitulación: mi gobierno no entregó las decisiones a las autoridades norteamericanas sino que simplemente, dejó de ejercerlas de manera discrecional, lo cual había sido un reclamo reiterado de la sociedad mexicana ante los excesos estatistas de nuestra historia. Pero además, la negociación no representó la renuncia a definir el rumbo de nuestra economía, sino la oportunidad de que, con la apertura de los mercados, los estadounidenses renunciaran, también, a la actuación unilateral que sus críticos han calificado como
ERNESTO ZEDILLO PONCE DE LEÓN (1994 - 2000)
EL ERROR DE DICIEMBRE DE 1994
El 9 de diciembre de 1994, en cumplimiento del mandato legal, el nuevo gobierno presentó ante el Congreso las iniciativas de Ley de Ingreso y Presupuesto de Egresos de la Federación. En cumplimiento de la Ley de Planeación, las iniciativas debían acompañarse del documento de "Criterios Generales de Política Económica para 1995". Este documento estaba firmado por el presidente Ernesto Zedillo. Los textos fueron integrados por un equipo de economistas profesionales encabezados por Zedillo. Al firmarlos, el Presidente reconoció que el documento representaba un análisis cuidadoso. Por eso afirmó:
VICENTE FOX QUEZADA (2000 - 2006)
PRIVATIZACIÓN DE PEMEX
Fox asegura que no privatizará Pemex ni la Comisión Federal de Electricidad
El nuevo presidente de México, Vicente Fox, reiteró el viernes en su discurso de investidura que no privatizará el monopolio estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) ni la estatal Comisión Federal de Electricidad.
"En el marco constitucional vigente, Pemex continuará como propiedad exclusiva de la nación", dijo Fox en su primer discurso oficial como mandatario mexicano, antes de precisar que sí promoverá una transformación en la empresa para hacerla más eficiente.
"Debe reconocerse, sin embargo, que (Pemex) enfrenta una fuerte rigidez administrativa, presupuestal y normativa que le impiden desarrollarse como empresa eficiente y competitiva", afirmó ante el Congreso.
"Hoy ratifico que Pemex será transformada en una empresa manejada con criterios de eficiencia y sujeta a criterios de vanguardia a nivel mundial. Será también una empresa con sensibilidad para las regiones, los estados y los municipios en los que opera", agregó.
PRIVATIZACIÓN DE LA COMISIÓN FEDERAL DE ELECTRICIDAD
Con respecto a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la mayor de las dos empresas estatales que controlan la producción y distribución de electricidad en el país, Fox dijo que tampoco la privatizará, pero reiteró sus planes de promover una apertura a la inversión privada.
"No, no, no se privatizará la Comisión Federal de Electricidad ni se venderá ninguno de sus activos", dijo Fox, sin mencionar la otra eléctrica estatal, la compañía de Luz y Fuerza del Centro.
"Promoveremos ante este honorable Congreso la apertura a la inversión a fin de salvaguardar los recursos fiscales para invertirlos en hospitales, escuelas, desarrollo de comunidades indígenas y combate a la pobreza", añadió.
Fox hizo sus declaraciones mientras organizaciones civiles y de trabajadores tenían convocada una manifestación en otro punto de la ciudad para rechazar el apoyo de Fox a la apertura del sistema eléctrico mexicano a la inversión privada.
Fox ha dicho en diversas ocasiones que es necesaria la participación de capital privado en el sector energético y miembros de su equipo de transición han señalado que el mandatario buscará impulsar la competencia en la generación mientras que el Estado mantendrá el control de la transmisión.
Según líderes de las organizaciones participantes en la protesta, las reformas de Fox abrirán la puerta a la privatización del sector.
El gobierno saliente insistió en que era urgente la inversión de unos 45.000 millones de dólares para expandir y mejorar la red eléctrica nacional durante la próxima década.
En los últimos años, el gobierno ha vendido algunos contratos de generación a compañías externas, pero las concesiones enfrentan aún un fuerte control estatal, lo que ha provocado una falta de interés cada vez mayor en esos contratos.
Actualmente trabajan en la industria eléctrica unos 96.000 trabajadores sindicalizados, una de las mayores bases sindicales del país
REFORMA FISCAL
El presidente de la república Vicente Fox Quezada, en su campaña de proselitismo dijo: “debemos implementar una reforma fiscal mas clara y transparente; con una manera de tributación donde los ricos paguen mas que los pobres” Pero estas palabras no fueron lo suficientemente convincentes para el Secretario de Hacienda y Crédito Público Francisco Gil Díaz elaboró una propuesta de reforma fiscal que fue enviada al congreso de la unión en donde se implementó gravar con 15% de IVA en medicinas y alimentos, los argumentos dados fueron el que la gente mas rica gasta mas en estos productos y la gente pobre no tanto; si es cierto pero la proporcionalidad no es la misma ya que una persona de bajos ingresos su ingreso lo destina solo al consumo y una persona de altos ingresos aparte de consumir mas que la persona de ingresos bajos destina al ahorro su excedente.
En fin, esta reforma hasta hoy no ha sido aprobada ojalá no se llegue a aprobar ya que no se pueden poner impuestos de países de primer mundo a un país de tercer mundo. Lo único que hay que agregar es que si México logra aguantar el golpe de la reforma fiscal podría aguantar hasta siete años una estabilización en el tipo de cambio y su economía iría hacia arriba, ahora el problema es que aguante este golpe.
REFORMAS ECONOMICAS
http://www.cnn.com/video/data/2.0/video/spanish/2009/07/20/WEBcoutino.cnn.html
La idea lleva tiempo de haberse creado y se refiere a la necesidad de realizar cambios que actualicen a las leyes y a las instituciones que regulan al desempeño de la autoridad en la economía.
La idea lleva tiempo de haberse creado y se refiere a la necesidad de realizar cambios que actualicen a las leyes y a las instituciones que regulan al desempeño de la autoridad en la economía.
Esos cambios para ponerse al día los conocemos como reformas estructurales y tienen el objetivo de mejorar las condiciones y hacerlas más propicias a la elevación de los estándares de vida.
Son varios los campos en los que se precisan las reformas. Usualmente se habla de reformas fiscales, de energía, laboral, seguridad, educación, telecomunicación, bancos, registro de propiedad, de Estado, indígena… más las que a usted se le ocurran.
Se trata de poner al día a las leyes y a las instituciones para adecuarlas a la situación actual y futura.
Esta necesidad viene, al menos en el caso de México, de la gran diferencia que existe entre las condiciones del pasado, con una economía cerrada, no competitiva, intervenida por el gobierno, corporativista y demás, a las condiciones del presente, con una economía abierta, competitiva, libre, democrática.
Ni las leyes ni las instituciones de antes sirven para lo que ahora se vive. Por ejemplo, las leyes fiscales necesitan cambiarse.
Ahora son complejas, llenas de excepciones y tratamientos diferentes, con tasas múltiples y elevadas, de redacción complicada. El mundo actual frena su potencial con impuestos de esa naturaleza. Se necesitan impuestos bajos, sencillos de calcular, sin excepciones… algo como el flat tax que ya existe en varios países. Igualmente, las leyes laborales de antes encarecen el trabajo, producen desempleo, elevan precios.
Ya no puede operarse así en un mundo tan diferente. Las nuevas leyes laborales deben ser flexibles y por eso capaces de promover la creación de empleo. En este terreno, las pensiones son otra de las reformas a realizarse para actualizarse a una situación demográfica diferente y darles solidez, por ejemplo, creando cuentas individuales y no fondos colectivos.
La generación de energía ya no puede soportar el esquema anticuado de empresas monopólicas como Pemex en México. Los riesgos deben diversificarse y tenerse incentivos de mercado para lograr nuevos desarrollos y adelantos.
En el campo de la educación, los resultados indican la necesidad de un cambio para darle un giro que enfatice calidad y hábitos de pensamiento. Las reformas de Estado sugieren cambios para hacer del gobierno un ente más eficiente, que funcione bien en sus áreas de competencia y se faciliten los acuerdos entre partidos, sin los conflictos que detienen su trabajo y hacen que los partidos estén más preocupados por ganar elecciones que por gobernar, como sucede en México.
En fin, las reformas no son una cuestión insignificante, sino la prioridad mayor que se tiene en la política de muchas naciones, desde Francia y Argentina hasta México y los EEUU.
El mundo ha cambiado, la tecnología nos ha revolucionado y el retraso que sufrimos es político, de leyes e instituciones. Se trata de quitarnos la bola de metal que impide que avancemos más, ésa con la que se caricaturiza a los prisioneros para que no escapen.
Si esas reformas y actualizaciones no se realizan con prontitud el costo es la pobreza y la miseria, un retroceso en el bienestar. Más aún, las reformas son terrenos de enfrentamiento entre dos visiones, la que ve hacia el futuro y la que ve al pasado. Personajes como Evo Morales, Fidel Castro, Kirchner, López Obrador, Hugo Chávez tienen esa mentalidad, la del regreso a los sistemas centralizados, totalitarios, de grandes gobiernos, que se usaron en el pasado.
Lo que necesitamos es exactamente lo opuesto, sistemas abiertos, flexibles, democráticos, con gobiernos fuertes en sus funciones esenciales, para un mundo abierto, libre, que se beneficie de las iniciativas individuales de las personas.
En otras palabras, estamos en el choque de dos mentalidades, un real duelo de ideas entre el pasado y el futuro. En la medida en la que esto se entienda se estará dando pasos que eleven las oportunidades de desarrollo y prosperidad.
Como siempre en la historia del mundo, éste es otro duelo de ideas y dependiendo de las que prevalezcan será nuestro futuro, uno de mejor vida o uno de pobreza.
BLOQUES ECONOMICOS
La formación de los bloques
En 1947, finalizada ya la Guerra, tomó estado oficial el enfrentamiento entre los dos bloques.
Las crisis de posguerra, tanto inglesas como francesas, pusieron a EE.UU. en el papel de líder de uno de los bloques.
Washington basó su estrategia en lo siguiente: 1) El sostenimiento de un gran potencial militar y tecnológico. 2) La ayuda económica para la reconstrucción de los países afectados a cambio de amplias facilidades para la penetración económica y política en esos países. 3) El apoyo a las dictaduras anticomunistas en todo el mundo. 4) la creación de un sistema de pactos internacionales. 5) El establecimiento de bases en puntos estratégicos. 6) La propagación de la ideología anticomunista.
Moscú apostaba a lo siguiente: 1) Se basaba en la firme creencia de que el capitalismo occidental no podría superar el caos que siguió a la Segunda Guerra. 2) El continuo aumento del poderío militar (En 1952 era del 80% del gasto público) y tecnológico. 3) La formación de un bloque militar con los países de Europa Oriental. 4) El establecimiento de un sistema económico integrado, con el control de las economías de sus aliados-satélite. 4) El apoyo a los movimientos de liberación en todo el mundo.
BLOQUES ECONOMICOS:
2.1.1. UNION EUROPEA: Su unidad monetaria es el EURO, Es la organización supranacional del ámbito europeo dedicada a incrementar la integración económica y política y a reforzar la cooperación entre sus estados miembros. Nació el 1 de noviembre de 1993. Conformado por doce miembros: Bélgica, Dinamarca, Francia, Alemania, Reino Unido, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal y España.
2.1.2. NAFTA: Es el acuerdo económico, cuyo nombre original es North American Free Trade Agreement, ue firmado por Canadá, México y Estados Unidos el 17 de diciembre de 1992, y entró en vigor el 1 de enero de 1994. Los respectivos signatarios del Tratado fueron el primer ministro canadiense Brian Mulroney, el presidente mexicano Carlos Salinas de Gortari y el presidente estadounidense George Bus.
2.1.3. COMUNIDAD ASIÁTICA: Muchas zonas de Asia están económicamente subdesarrolladas. Un elevado porcentaje de la población del continente se dedica a la agricultura, pese a lo cual gran parte de la actividad agrícola se caracteriza por cosechas y productividad laboral relativamente bajas. En conjunto, una minoría de los asiáticos está empleada en actividades de manufactura; en muchas ocasiones los centros urbanos y las industrias no se han integrado adecuadamente con el sector rural. Los sistemas de transporte locales e internacionales de los países asiáticos todavía están poco desarrollados en muchas zonas, pero han mejorado notablemente en los últimos años.
2.1.4. MERCOSUR: organización regional del espacio sudamericano constituida en virtud del Tratado de Asunción. Fue éste firmado el 26 de marzo de 1991 por los presidentes de Argentina (Carlos Saúl Menem), Brasil (Fernando Collor de Mello), Paraguay (Andrés Rodríguez) y Uruguay (Luis Alberto Lacalle). El espacio que engloba el Mercosur constituye un mercado de más de 200 millones de personas. Esta cifra se aproxima a la población de América del Norte y no dista demasiado de los 300 millones de habitantes de la Unión Europea (UE). El producto interior bruto (PIB) del área integrante del Mercosur alcanza los 800.000 millones de dólares, aproximadamente el 60% del PIB regional.
2.1.5. GRUPO DE LOS SIETE (G-7): Es el foro político y económico formado por los siete países más industrializados del mundo: Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos. El G-7 (cuyo nombre completo es Grupo de los Siete Países más Industrializados) nació de un modo informal a raíz de las reuniones de los ministros de finanzas organizadas en la década de 1970.
2.1.6. GRUPO DE LOS 77 (G-77): conjunto de países en vías de desarrollo y del Tercer Mundo creado en 1964 para adoptar posiciones comunes en temas de comercio y desarrollo económico, promover sus intereses económicos y potenciar su poder negociador en el seno de la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD).
2.2. ALEMANIA:
A pesar de los grandes destrozos sufridos por las dos Alemanias durante la II Guerra Mundial, ambos países surgieron como potentes economías en la década de 1960. Alemania Occidental se convirtió en una potencia económica mundial en las dos décadas posteriores, mientras que Alemania Oriental fue una de las economías más avanzadas entre los países componentes del Pacto de Varsovia. La reunificación ha supuesto un golpe muy duro para la economía de ambas zonas. La Alemania Occidental ha tenido que soportar los costes de la financiación de las mejoras en la infraestructura, el medio ambiente y la industria de la parte oriental, mientras que muchas empresas del Este han quebrado debido a la fuerte competencia de las de Alemania Occidental. Aún así, Alemania sigue siendo una potencia en la economía mundial. En 1997 el producto interior bruto fue de 2,09 billones de dólares.
Moneda y banca
La unidad monetaria en Alemania es el deutsche mark, o DM (1,73 marcos alemanes equivalían a 1 dólar estadounidense en 1997). El marco se divide en 100 pfennigs.
El banco de emisión es el Deutsche Bundesbank, una institución autónoma no gubernamental con sede en Frankfurt. Entre los bancos comerciales privados más grandes de Alemania se encuentran el Deutsche Bank A.G., el Dresdner Bank A.G. y el Commerzbank A.G. Existen muchas instituciones de ahorro y créditos. Tras la reunificación, los bancos más grandes del país se establecieron rápidamente en la antigua Alemania Oriental.
La unidad monetaria de Alemania Oriental era el marco de Alemania Oriental subdividido en 100 pfennigs. En julio de 1990, las monedas de las dos Alemanias se unieron. A la mayor parte de los alemanes orientales se les permitió equiparar 4.000 marcos orientales a los occidentales y canjear el resto por marcos occidentales a un cambio de dos a uno. Según las estipulaciones del Tratado de Maastricht se formará un Banco Central Europeo, que tendrá sede en Frankfurt.
Comercio exterior
Alemania es un gran país comercial. En abril de 1994, el Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio (GATT) situaba a Alemania como uno de los principales países exportadores en 1993. Desde comienzos de la década de 1950 hasta la de 1980, Alemania Occidental obtuvo un mayor beneficio de las ventas por exportación de lo que gastaba en importación. Alemania Oriental desempeñó un importante papel comercial dentro del bloque soviético. Sin embargo, tras la unificación, el excedente comercial de Alemania se ha reducido. Las principales exportaciones del país son maquinaria, vehículos de motor, productos químicos, hierro, acero, y tejidos y vestidos. Sus principales importaciones son petróleo crudo y refinado, maquinaria, alimentos, productos químicos, ropa y vehículos de motor. Alemania continúa siendo un destacado socio comercial de los países occidentales (entre los que destacan los Estados miembros de la Unión Europea, Estados Unidos, Suiza y Austria y los países de Europa Oriental). Además, en la Unión Europea la mayoría de los productos industriales alemanes circulan libremente en los Estados miembros de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA). En 1996 el valor de las exportaciones fue de 521.111 millones de dólares y el de las importaciones de 455.683 millones de dólares.
2.3. LOGROS ASIÁTICOS:
Muchas zonas de Asia están económicamente subdesarrolladas. Un elevado porcentaje de la población del continente se dedica a la agricultura, pese a lo cual gran parte de la actividad agrícola se caracteriza por cosechas y productividad laboral relativamente bajas. En conjunto, una minoría de los asiáticos está empleada en actividades de manufactura; en muchas ocasiones los centros urbanos y las industrias no se han integrado adecuadamente con el sector rural. Los sistemas de transporte locales e internacionales de los países asiáticos todavía están poco desarrollados en muchas zonas, pero han mejorado notablemente en los últimos años.
Sin embargo, hay un creciente número de excepciones. Japón ha modernizado con éxito su economía, al igual que Israel, Corea del Sur, Singapur, Hong Kong y, en menor grado, Indonesia, Malaysia, Tailandia, Turquía y los estados petrolíferos de la península Arábiga. En general han conseguido tasas de crecimiento económico que superan el 5% anual, un porcentaje que se aleja de sus tasas de crecimiento demográfico. En cambio, aunque los países del suroeste de Asia han hecho progresos, la distribución de los ingresos ha quedado más concentrada que en otros países. Estimulada por las inversiones extranjeras a gran escala, la rápida privatización y la industrialización, la República Popular China consiguió el crecimiento más rápido de Asia a principios de la década de 1990. Se estima que la economía china creció un 12% en 1992, aunque los niveles de renta per cápita permanecieron relativamente bajos. Vietnam y Laos, dos de los países más pobres de Asia, están empezando a conseguir un significativo crecimiento económico y a captar un notable nivel de inversión extranjera.
2.4. SINGAPUR:
La ciudad portuaria de Singapur se creó como centro de distribución sobre la base de la tradición comercial autóctona; es una de las áreas económicas de Asia, que posee unas tasas de crecimiento anual más elevadas, el 8,5% desde 1966, al que hay que añadir un ligero aumento desde 1990. El nivel de vida es de los más altos de los países de la región. La importancia que ha tenido el comercio internacional se ha diversificado hacia una industria ligera, y hacia el sector financiero. En 1997 el producto interior bruto se estimaba en 96.319 millones de dólares, lo que equivalía a 31.040 dólares per cápita (según datos del Banco Mundial ). El presupuesto anual para el año económico 1996 establecía unos ingresos de 26.880 millones de dólares y unos gastos de 19.457 millones de dólares.
Moneda y banca
La unidad monetaria es el dólar de Singapur dividido en 100 centavos (en 1997 1,48 dólares de Singapur equivalían a 1 dólar estadounidense). La actividad financiera la lleva a cabo el Banco Central de Singapur aunque no se encarga de la emisión de moneda, actividad desempeñada por la Oficina de Comisionados de Moneda. Singapur es un importante centro de la banca mundial. El Banco de Desarrollo de Singapur es el mayor banco del país; en esa misma década operaban 128 bancos comerciales y 78 mercantiles. La banca extranjera controla más del 60% de los activos bancarios totales. La Bolsa de Singapur es un importante centro transaccional para las monedas asiáticas, aunque con tasas más bajas que la de Tokio.
Comercio exterior
Singapur es el puerto más activo del mundo y extiende sus muelles hasta el puerto de Keppel en la costa meridional. La mayor parte de su comercio se centra en artículos producidos en la región. En 1996 las importaciones anuales suponían un volumen total de 131.338 millones de dólares, mientras que las exportaciones alcanzaban la cifra de 125.014 millones de dólares. Estados Unidos, Japón, Malaysia, China, Taiwan, Alemania y Hong Kong son los principales socios comerciales de Singapur. Las reservas de divisas a mediados de la década de 1990 eran de 60.000 millones de dólares estadounidenses, lo que sitúa a Singapur en el primer puesto a nivel mundial.
2.5. TAIWÁN:
El gobierno ha venido aplicando un activo programa de industrialización, y en la década de 1980 las industrias eran el principal sector de la economía. La política económica se puso en práctica por medio de una serie de planes multianuales, que se iniciaron en 1953 y que se diseñaron con el objetivo de incrementar la producción y desarrollar las industrias de exportación. En 1991, Taiwan emprendió un programa de construcción de obras públicas con un presupuesto de 300 mil millones de dólares estadounidenses.
A finales de la década de 1980, el producto interior bruto había alcanzado la cifra de 91.700 millones de dólares (4.325 dólares per cápita) y el índice de crecimiento anual ascendió al 7%. El presupuesto anual registró 19.000 millones de dólares de gastos.
Comercio internacional
La actividad comercial de Taiwan es una de las más importantes de Asia. En 1996 el valor anual de las exportaciones fue de 115.726 millones de dólares y las importaciones supusieron 101.278 millones. Las principales exportaciones fueron textiles y prendas de vestir, equipos eléctricos y electrónicos, artículos de plástico, juguetes y productos de la industria alimentaria. Entre las importaciones destacaron petróleo bruto, madera, hierro y acero, maquinaria, equipos eléctricos y electrónicos y productos de la industria alimentaria. Taiwan comercia principalmente con Estados Unidos, Japón, Alemania, Hong Kong, Australia y Arabia Saudí.
2.6. HONG KONG:
Desde el final de la II Guerra Mundial, Hong Kong se ha transformado en uno de los centros industriales, financieros y comerciales más importantes del mundo. Igualmente desempeña el papel de trampolín para el comercio y la inversión en la China continental, lo que ha ido aumentando sus intereses económicos en el continente asiático.
Moneda y banca
La unidad monetaria de Hong Kong es el dólar de Hong Kong (7,7327 dólares de Hong Kong equivalen a 1 dólar estadounidense en 1995); la emisión se realiza a través del Banco de Hong Kong y Shanghai, el Banco Standard y Chartered y, desde 1994, del Banco de China. La colonia es un centro financiero importante en el que muchos bancos extranjeros tienen sucursales. La Bolsa de Hong Kong es una de las más importantes del mundo.
Comercio exterior
Su importancia como puerto marítimo se debe a su excelente puerto natural, que es el único apropiado entre Shanghai e Indochina. Hong Kong cobra pocos impuestos aduaneros, maneja una gran cantidad de mercancías y funciona como importante nexo con el mercado exterior de China. Los principales productos importados son comestibles, materias primas industriales, equipos de maquinaria y transporte, equipos de telecomunicaciones y químicos. Para la exportación destacan los productos textiles y de confección, así como los de relojería, maquinaria eléctrica, juguetes y piezas electrónicas y de informática. Los principales mercados con los que comercia Hong Kong son China (cuyas inversiones desempeñan un papel básico en el desarrollo económico chino), Japón, Alemania, Estados Unidos, Singapur, Corea del Sur, Canadá y Gran Bretaña.
2.7. COREA:
La república de Corea se divide en:
COREA DEL NORTE: Con el establecimiento de la República Democrática Popular se nacionalizó toda la industria y se colectivizó la agricultura. Sucesivos planes económicos han apuntado hacia el desarrollo de la industria pesada y en la mecanización de la agricultura. El presupuesto nacional anual estimado a finales de la década de 1980 se componía de 15.900 millones de dólares entre ingresos y gastos.
Moneda y banca
La unidad monetaria es el won (0,97 wones equivalían a 1 dólar estadounidense en 1991). Corea del Norte tiene tres bancos, todos ellos bajo control estatal; el Banco Central de Corea es el banco emisor.
COREA DEL SUR: Tradicionalmente, la economía de Corea del Sur se basaba en la agricultura; sin embargo, desde comienzos de la década de 1960 se ha llevado a cabo una industrialización extraordinariamente rápida; el producto interior bruto (PIB) ha crecido más de un 9% anual entre mediados de la década de 1960 y comienzos de la de 1990; desde entonces ha disminuido aproximadamente en un 8%. Actualmente, Corea del Sur es una de los doce mayores estados comerciales del mundo. Los planes quinquenales económicos que comenzaron en 1962 se han concentrado en el desarrollo industrial. Las ayudas económicas, especialmente de Estados Unidos y Japón, han sido muy importantes para el crecimiento económico del país. El producto interior bruto (PIB) en 1996 era de 484.777 millones de dólares. La agricultura ha contribuido aproximadamente en un 6,28% a esos datos mientras la industria y la minería lo han hecho en un 42,82%. A mediados de la década de 1990 los datos del presupuesto anual mostraban un balance favorable entre ingresos y gastos en 11.075 millones de dólares.
La economía surcoreana ha estado tradicionalmente dominada por los chaebol (conglomerados industriales), grandes empresas como Samsung y Hyundai. Estas corporaciones gigantes han sido objeto de una reciente reforma legislativa, pues se cree que obstaculizaban la libre competencia. Los chaebol se han redirigido hacia sus propias áreas de negocio.
Moneda y banca
La unidad monetaria de Corea del Sur es el won dividido en 100 ohons (804,45 won equivalían a un dólar estadounidense en 1996). El banco emisor es el Banco de Corea. Existen 23 bancos comerciales nacionales y provinciales, además de algunos gubernamentales y numerosas cooperativas agrícolas.
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